viernes, 13 de enero de 2017

El Guero, mi gran rival en la primaria

Me acuerdo del Guero al menos unas 15 veces al año, me pregunto ¿que ha sido de el?, ¿a que se dedicara?. Nunca tuvimos la oportunidad de compartir nuestros sueños, no dudo que haya ido a la universidad, terminó la universidad, incluso una maestría.  Quizás hoy sea abogado, ingeniero, arquitecto o medico, dudo mucho que se inclinara a la Administración. Es posible que viva en Estados Unidos, con casa propia, una linda  esposa y quizás un par de hijos.
Durante los 6 años que duró la primaria, fuimos rivales, peleábamos por ser el alumno más destacado de un grupo de unos 20 niños, siempre tuvo a su favor el que sus padres tuvieran el grado de Bachiller y le dieran apoyo por las tardes.
La competencia era muy reñida, en ocasiones el obtenía el primer lugar, en otras era yo, así la pasamos toda la primaria, nos emocionaba competir, el uno al otro nos obligábamos a ser mejores cada día, podríamos decir que eramos el dúo Nauto-Sasuke.
A todo esto, le decíamos El Guero porque el era de piel blanca, lo heredo de su madre, una mujer que a sus 35 años tenía la dicha de poseer un cuerpo perfecto, medidas perfectas, bonitas piernas, buena estatura, unos pechos que se hacían notar. En ese entonces yo no tenía ni doce años, así que no, no fantaseaba con esa mujer.
A menudo El Guero y yo nos juntábamos a estudiar por las tardes, en su casa, su madre nos preparaba  unos ricos Buñuelos o Donas, y para acompañarlos un delicioso champurrado.
A finales del quinto grado se selecciona a la escolta, esta se compone por  los alumnos con mejores promedio, siendo el abanderado el del mejor promedio. El Guero me venció por unas décimas, así que el fue el abanderado.
La última vez que nos vimos fue en  los primeros meses de la secundaria, en la secundaría nos enfrentamos con rivales más complicados, los primeros meses le pusimos empeño y estábamos entre los mejores. Pero un día el Guero se fue a los Estados Unidos, en aquellos días no existía Facebook, Hotmail recién estaba viendo la luz, así que perdimos todo contacto. Creo que ese día deje de ponerle empeño al estudio, perdí la motivación, realmente la perdí, pude haber hecho más, haber ido a la Universidad con una beca, ser un buen ingeniero, pero no, empecé a pasar desapercibido y a quedar en el olvido.
Siempre fuimos esforzados, no se si eramos inteligentes, pero sacabamos buenas notas, eso si, a esa edad ninguno de los dos mostraba rasgos de lider. Hoy no se nada del Guero, pero me gustaría saber de el, problamente trabajé en una gran empresa, quizas hoy sea un gran lider, liderango un gran equipo, no se si algún día nos volvamos a encontrar, pero será entretenido.
En la vida necesitamos de un rival que nos impulse a ser mejores, este rival no tiene por que ser otro, podemos ser nosotros mismos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario